miércoles, 24 de septiembre de 2014

A las siete y media de la tarde puede pasar cualquier cosa


Paró de llover,
ahora el cielo parece una remera
noventosa desteñida con lavandina.

El vientito que me pega en la cara
es la sombra del mundo que
pasó al mango por al lado mío.

Sigo caminando,
una brújula explota en mi cabeza,
me crece un reloj en el pecho,
te pienso,
y se me hace de noche.

miércoles, 10 de septiembre de 2014

El pizarrón de la parrilla

El pizarrón de la parrilla
que está sobre Acoyte,
me hace pensar en vos.

Porque un sándwich de vacío
es lo mismo que ponerme a mí
entre dos panes gigantes,
la noche que me dijiste que
a veces el amor no alcanza,
y todo eso que solo entienden,
los que toman la decisión.

jueves, 4 de septiembre de 2014

Estrategia


Vos te vas a reír,
pero a mí me hace bien pensar que
algún pibe está tapado hasta la cabeza,
con la luz apagada,
mientras You Tube reproduce
un compilado de cumbia noventosa;
o que una piba rindió un final,
y se puso a llorar de la alegría,
cuando la llamó su hermano.

Ya sé que te vas a reír;
pero a mí me hace bien pensar que mi abuela
se puede volver a enamorar de un viejo bueno,
gran jugador de bochas,
quinielero y bailarín;
o que el Río Arrecifes tiene agua cristalina,
y los que viven cerca no se inundan nunca más,
solo disfrutan sus orillas,
con mallas de colores,
como los dibujos de un manual de primaria.

Esa es mi estrategia,
un poco ingenua;
pero es mía,
y me sirve,
me sana,
me saca por un rato de la jaula,
sobre todo estos días,
que extraño hasta tu forma de tomar agua del pico,
descalza,
dormida;
estos días apurados,
en los que me tiembla el piso
cuando alguien te nombra,
estos días que me cansan,
me paralizan,
me desubican,
me dejan el corazón sin señal;
y termino siempre así:
frente al monitor,
escribiendo con tus manos,
leyendo con tus ojos.