Paró de
llover,
ahora el
cielo parece una remera
noventosa
desteñida con lavandina.
El
vientito que me pega en la cara
es la sombra del mundo que
pasó al
mango por al lado mío.
Sigo caminando,
una
brújula explota en mi cabeza,
me crece
un reloj en el pecho,
te pienso,
y se me
hace de noche.
Hola loco! el otro día en la flia me compré tu libro; Retiro. Me encantó. Cada poema es un viaje, una imagen, un momento. Es emocionante, divertido y algunos adjetivos más. Sólo quería decirte eso. Abrazo viejo
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